martes, 4 de octubre de 2011

Anonymous y la Muerte de Facebook

Desde la aparición de Anonymous en la red, no han dejado de suceder diversas acciones en las calles, en el espacio público, en las redes sociales. Anonymous sin duda sigue funcionando como un artefacto de difusión de ideas, de propuestas para contrarrestar el resquebrajado sistema político y económico en el que actualmente vivimos. Pero Anonymous, ¿dónde está? ¿Quién es? ¿De qué se trata? Mucha gente se hace esas preguntas sin tener respuestas exacta, y es que no hay respuesta exacta. Anonymous es, por sobre todo, una idea. Y a partir de esta, diversas redes, ramas, acciones y movimientos han sucedido tanto en la realidad como en las redes sociales. El mayor impedimento de una revolución es pretender solidificarse, crear nuevos estatus o sistemas de supuesto bienestar u orden, pretender que superado el riesgo se puede alcanzar un cambio estable, sostenible, que abarque a todos indefinidamente. Quizás nada más equivocado. Y es por esto que Anonymous adquiere gran impacto, en la difusión de acciones de protesta y activismo.
Recientemente ha habido algo de debate sobre las operaciones que Anonymous ha estado realizando, entre algunos mismos participantes de la red. Sobre todo, se ha criticado una página que se llama “What is the plan?”, en la que al parecer se presentan tres operaciones clave para el año 2011, la primera de estas fue “Operation Onslaught” del pasado el pasado 30 de julio, en el que se pedía a todos los seguidores de Anonymous a informarse sobre los problemas reinantes en sus comunidades, tenerlos presentes, y hacer propaganda tanto en las calles como en la red ese día. Sin embargo, se postearon del mismo modo información de la comunidad “original” del colectivo Anonymous en que se negaba que Anonymous esté participando de la página “What is the plan?” que, efectivamente, requería correos electrónicos y modos de registro para poder acceder a sus foros y demás opciones.
Queda el debate abierto entonces. El último anuncio que ha salido a la red, ha sido el deseo de Anonymous de destruir finalmente la red social de Facebook, el próximo 5 de noviembre. Nada queda claro sobre la veracidad de esta operación, y del mismo modo ya está en discusión por toda la veracidad si esta operación se realizará efectivamente ese día. ¿Es posible que Anonymous logré destruir permanentemente a Facebook? De lograrlo, probablemente, estaríamos frente a uno de los eventos mediáticos más importantes de la década, y quizás el más revelador, ya que es más que sabido que la red social Facebook maneja la cantidad de información personal de miles de usuarios más grande posible. ¿Cómo saber entonces quién está verdaderamente detrás de la máscara? El valor de Anonymous hasta la fecha, además de las operaciones efectivas realizadas contra Paypal y Mastercard, así como otras webs de alto poder, está en la capacidad de descentralizar información y sobre todo, cargar de entusiasmo a un mundo que grita por cambio y mejora, desesperadamente. Habrá que esperar al 5 de noviembre y ver lo que pasa.